Preparativos Finales

¡Importante llamamiento de Dios Padre a todos!

Antes de que desencadene Mi Brazo con TODA Su Fuerza, CONTRA el Planeta Tierra, quiero INVITAR A TODAS LAS PERSONAS a que sigan Mis Indicaciones y Mis Instrucciones que daré en este Mensaje porque quiero que TODAS LAS PERSONAS, sean SALVADAS y vengan a Regresar a Mi Casa de donde vinieron, de donde salieron y de donde están. (Continua...)

Alerta Roja

El FIN de nuestra Libertad, de nuestra Existencia

El Nuevo Orden Mundial que le sirve a mi adversario ha comenzado ya a dominar en el mundo, su agenda de tiranía comenzó con el plan de las vacunas y vacunación contra la pandemia existente; vacunas estas que no son la solución, sino el comienzo del holocausto que llevará a la muerte, transhumanismo e implantación de la marca de la bestia, a millones de seres humanos. (Continúa)

 

Mensajes de diversas orígenes

 

viernes, 8 de marzo de 2024

Qué Dulce es Mi Santa Palabra

Mensaje de Nuestro Señor Jesús a Valentina Papagna en Sidney, Australia, el 29 de febrero de 2024

 

Por la mañana, mientras rezaba, nuestro Señor Jesús se acercó y dijo: «Valentina, hija Mía, te diré lo que hace que tus mensajes y enseñanzas sean tan únicos: es porque vienen directamente de Mí, y que Yo te los revelo».

«Y también quiero decirte que dentro de muy poco tiempo, toda la Creación será renovada, y la humanidad experimentará todo lo que está llegando al mundo. Habla Mi Santa Palabra y difúndela entre la gente».

«No escuches a nadie más, sólo a Mí. ¿Verdad?» «Porque sólo te confunden».

«Anima a la gente a arrepentirse y a cambiar: eso es lo más importante en la vida de cualquier persona. Lo más importante es buscar primero a Dios y venir a la Luz, y no vivir en las tinieblas del pecado, pues es el diablo quien les lleva a eso.»

«Alabadme y amadme por todo lo que comparto con vosotros».

Gracias, Señor Jesús, Te amo.

En esta visión, mientras nuestro Señor Jesús me hablaba, yo estaba sentada en la hierba, y esparcidos a mi alrededor estaban todos los mensajes escritos que me había dado nuestro Señor. Cuando pasaba la gente, yo les entregaba los mensajes. Pero antes de dárselos, rociaba cada uno con chocolate. Todos los querían, y cuando cogían los mensajes y se alejaban, sonreían.

Tan sorprendida conmigo misma por lo que estaba haciendo, le dije a nuestro Señor: «Señor, ¡nunca había hecho esto antes!»: rociar los mensajes con chocolate.

Él sonrió y dijo: «Lo has hecho porque Mi Santa Palabra es muy dulce».

Gracias, Señor Jesús, por todas las gracias y bendiciones.

Origen: ➥ valentina-sydneyseer.com.au

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